Si se habla de muertes también se puede hablar de unas de sus causas, el narcotráfico y el crimen organizado. El problema no está sólo en su existencia, sino en el control que ejercen sobre otras áreas de poder, que en este caso dicen hacer justicia y velar por la seguridad del país, mientras que se dejan ordenar por quienes hacen el daño.
Cada sexenio llega una nueva cabeza al gabinete presidencial y como es costumbre cada presidente realiza proyectos para acabar con el narcotráfico y el crimen organizado, sin embargo estos en lugar de disminuir van creciendo tanto como el desempleo y la pobreza.
Lo nuevo es que Felipe Calderón en los señalamientos de la operación limpieza ha hablado de que se realicen investigaciones que ya no sólo sometan a sospechosos de la Procuraduría General de Justicia, sino que estas lleguen a él.
Mas de nada sirve que hable si eso no se vuelve una realidad. Además hay que agregar que las personas que trabajan en las instituciones proveedoras de seguridad no están lo suficientemente capacitadas, cómo es posible que si se le aplica un examen a las personas que trabajan en el ministerio público y el 51% repruebe, esto no habla de otra cosa que no sea ineptitud y si la seguridad está lejos del mexicano con estos resultados se crea un abismo que nos separa de conseguirla.
Casualmente en últimos días se han incrementado las muertes de personas que desempeñan cargos públicos, y como si esto fuera poco, las personas que están investigando estos homicidios también pierden la vida. En lo que van del año van mínimo 6 mil muertes relacionadas con el narcotráfico. Será que esta cifra tampoco es lo suficientemente alarmante, me queda claro que hablar de cientos no atrae la atención de las autoridades, para muestra las muertas de Ciudad Juárez, pero que miles aún no sean bastantes para que se lleven a cabo acciones efectivas no es admisible.
El problema no es que los proyectos planteados para acabar con los males sean malos, si bien en cierto algunos de ellos lo son, el principal problema es que nos e llevan a cabo y esto hace que no se obtengan los resultados deseados. El plan que se presenta como operación limpieza podría ser altamente efectivo, pues el principal error que tenemos es que quienes están procurando justicia y seguridad sean quienes están creando todo lo contrario, entonces ¿qué esperamos de las demás personas? Mejor ni preguntar, la respuesta no es nada agradable.
Cada sexenio llega una nueva cabeza al gabinete presidencial y como es costumbre cada presidente realiza proyectos para acabar con el narcotráfico y el crimen organizado, sin embargo estos en lugar de disminuir van creciendo tanto como el desempleo y la pobreza.
Lo nuevo es que Felipe Calderón en los señalamientos de la operación limpieza ha hablado de que se realicen investigaciones que ya no sólo sometan a sospechosos de la Procuraduría General de Justicia, sino que estas lleguen a él.
Mas de nada sirve que hable si eso no se vuelve una realidad. Además hay que agregar que las personas que trabajan en las instituciones proveedoras de seguridad no están lo suficientemente capacitadas, cómo es posible que si se le aplica un examen a las personas que trabajan en el ministerio público y el 51% repruebe, esto no habla de otra cosa que no sea ineptitud y si la seguridad está lejos del mexicano con estos resultados se crea un abismo que nos separa de conseguirla.
Casualmente en últimos días se han incrementado las muertes de personas que desempeñan cargos públicos, y como si esto fuera poco, las personas que están investigando estos homicidios también pierden la vida. En lo que van del año van mínimo 6 mil muertes relacionadas con el narcotráfico. Será que esta cifra tampoco es lo suficientemente alarmante, me queda claro que hablar de cientos no atrae la atención de las autoridades, para muestra las muertas de Ciudad Juárez, pero que miles aún no sean bastantes para que se lleven a cabo acciones efectivas no es admisible.
El problema no es que los proyectos planteados para acabar con los males sean malos, si bien en cierto algunos de ellos lo son, el principal problema es que nos e llevan a cabo y esto hace que no se obtengan los resultados deseados. El plan que se presenta como operación limpieza podría ser altamente efectivo, pues el principal error que tenemos es que quienes están procurando justicia y seguridad sean quienes están creando todo lo contrario, entonces ¿qué esperamos de las demás personas? Mejor ni preguntar, la respuesta no es nada agradable.
1 comentario:
Muy bien. Solamente recuerde que el nombre de programas va con mayúsculas. Por eso Operación Limpieza es con altas. También, cuando sustituye un sustantivo por éste o éstas, tiene que acentuar.
En relación con el contenido, vaya que lo logró. Ha comentado con la naturalidad que la caracteriza y la facilidad con que pude expresar sus ideas.
Sin embargo le hace falta ser un poco más aguda en su argumentación con más datos duros. Pero bien, siempre fue placentero leer este blog. La animo a continuar aprendiendo.
Un abrazo.
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