Mar de Letras 3

2 de octubre de 1968, un hecho difícil que ha sido contado muchas veces, pero del que no se tendrán datos más precisos que no sean los expresados por las personas que estuvieron ahí. En este sentido recomiendo el libro La noche de Tlatelolco de Elena Poniatowska.
Antes de leer este libro sabía que había sido un momento doloroso para nuestro país, pero no lo es tanto cuando los datos que se reciben vienen matizados por lo que las compañías informativas, bajo las órdenes de quién sabe quién llamado “gobierno” , han querido decirnos.
Mientras realizaba la lectura de este mar de letras fui conociendo a personas como Félix Lucio Hernández Gamundi, Luis González de Alba, la Nacha, la Tita y más personas, muchas de las que de seguro ustedes al igual que yo no han escuchado hablar. Sin embargo ellos están ahí, relatando sus vivencias durante momentos de tensión y compartiendo con nosotros momentos que marcaron sus vidas y que lamentablemente no marcaron las nuestras.
Tal vez ustedes digan que si las marcaron, pues estuvieron presentes en aquella masacre, pero si lo pensamos bien estamos actuando tal y como quienes controlan nuestro país quieren, sí, aunque suene ilógico, no es más que la verdad. Porque por lo visto de nada sirvió la muerte de tantas personas si al día de hoy nuestra situación es cada vez peor.
Quien lee este libro siente la emoción de las marchas, la unión de todas aquellas personas y el dolor de tan grande tragedia. Ahí se relata el pensamiento y el sentir de las personas a favor y en contra del movimiento estudiantil, las inconformidades, los motivos de las rebeliones y un poco acerca de las vidas de las personas.
El trabajo de Elena Poniatowska merece el reconocimiento de sus lectores, este libro significa 27 meses de trabajo. El orden de los testimonios va contando la historia de una manera que me impidió dejar de leer y motivó para llegar hasta el final.
La autora es periodista, escritora, y defensora de causas sociales. Parte de movimientos feministas aunque a muchos no les cuadre. A pesar de que su padre es de Polonia, su madre es mexicana y ella también lo es. A mi consideración un ejemplo de mujer, con las agallas para decir lo que muchos otros callan.
El rechazo que hizo al premio literario Xavier Villaurrutia por el libro del que en esta ocasión hablo, me hace confirmar que no se trata de una mujer que busca la fama, sino de aquella que sí ve las injusticias a las que otros nos tapamos los ojos.
El libro cuesta menos de 150 pesos, y en esta ocasión tengo que admitir que no es tan pequeño pero también que no se arrepentirán de leerlo. Pertenece a la editorial Era y se publicó en 1971.